viernes, 17 de abril de 2009

De los narradores


  En la entrada anterior hemos hablado en forma general sobre la escritura de la novela. Especialmente, sobre la manera de derrumbar la barrera de la página en blanco. Hemos manifestado algunas pautas a tener en cuenta para empezar la empresa de la escritura como lo son el tema o argumento, los personajes y sus nombres y el marco espacio-temporal.
  Ahora bien, querido escritor, ya tenemos más o menos armado el proyecto pero no debemos saltear un detalle fundamental que es la elección del tipo de narrador. 
  El narrador es el que cuenta dentro del texto. Su importancia es sustancial a la hora de pensar lo que queremos contar y cómo lo queremos contar.
  Tradicionalmente, se clasifica a los tipos de narradores en tres: a- omnisciente; b- testigo; c- protagonista.
  a- Se denomina omnisciente a aquel narrador en 3ª persona gramatical que conoce no sólo todos los hechos sino todo lo que piensan los personajes -o actores, según la teoría (bah)-, lo que sienten y hasta sus características personales más íntimas. Se trata del narrador que, sabiendo todo, es ajeno a los hechos, es decir, no participa en los sucesos. Cuenta desde fuera.
  El narrador omnisciente resulta una buena opción para relatos realistas, del tipo extremadamente detallista. También cuando se desea hacer una descripción psicológica exhaustiva de algún o algunos personajes.
  b- El narrador testigo puede aparecer en 1º o 3º persona gramatical. Se trata de un personaje más de la novela pero que no interfiere en los sucesos con su presencia. Es el fisgón que, en un tiempo posterior al de los sucesos, se pone a relatarlos. Como es de suponerse, este narrador chusma no conoce todos los hechos ni todas las circunstancias, sino sólo su punto de vista.
  La opción del narrador testigo es buena cuando se quiere escribir una novela desde un punto de vista social arbitrario, muy útil en novelas de tipo de denuncia social. También es útil para las llamadas novelas policiales, en las que el lector va descubriendo los pormenores del crimen a la vez que el narrador. O para cualquier relato en el que se quiera dejar una impronta subjetiva a través de comentarios parciales con respecto a los sucesos.
  c- El narrador protagonista siempre aparece en 1º persona gramatical. Como su nombre lo indica, es el personaje principal de la narración. Él mismo contará lo acontecido desde su perspectiva y con sus sentidos, ya que se trata de hechos en los que fue agente o paciente principal.
  Se podría decir que este narrador, el protagonista, le queda bien a casi todo tipo de relato. Pero es muy recomendable en dos circunstancias en especial: 
1-Cuando se quiere generar una empatía entre lo narrado y quien lo lee, haciendo que el lector sienta y piense a la vez que el narrador protagonista.
2- Cuando el escritor no tiene mucha experiencia. La primera persona gramatical suele ser mucho más maleable que las otras, ya que sólo tiene que tener en cuenta un punto de vista y la manifestación de sentimientos o pensamientos se puede hacer casi como en el mismísimo lenguaje cotidiano.

¿Con qué tipo de narrador se sienten más cómodos a la hora de escribir? ó ¿Qué tipo de narrador les resulta más interesante a la hora de leer?
 

5 comentarios:

  1. pero que blog más interesante y espléndido!

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  2. A mí me gusta escribir en primera persona y que todo el mundo vea lo que veo yo. Bueno, pero mi novela Leo Leyenda no es así (no hay caso, no puedo hacer ninguna afirmación, que yo misma me desautorizo).

    Besos.

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  3. madamelulu: Bienvenida y gracias. Este blog nuevo intenta tener una finalidad más bien práctica. En vista de la falta de carreras de literatura creativa que hay en Argentina, intento hacer un prueba piloto desde mis conocimientos universitarios de literatura totalmente aislada y controlada, donde toda palabra creativa es censurada. Así estamos... Espero tu visita. Saludos cordiales

    Mariela: Ya voy a hablar de los personajes rebeldes. ¿Qué te parece la idea del blog? Después nos tenemos que poner un instituto de literatura creativa juntas y así salen best sellers todos cortaditos por la misma tijera como en EEUU. Un beso grande.

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  4. A mi que simplemente escribo, estos consejos me vienen genial. Ahora, sólo me resta escribir un Quijote.
    Un beso!

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  5. Estoy esperando ese Quijote! Seguramente será totalmente nuevo y distinto como el de Pier Menard, porque será El Quijote de Marcelo! Un abrazo

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